Hoy es el turno de una verdadera joya gastronómica. Doble maravilla, dado que es un lugar de ensueño, tanto para los amantes del buen comer como para los locos y enamorados del vino ¡¡Disponen de la friolera de 127.000 botellas, que representan a las más cualificadas regiones del mundo!!: Hungría, Grecia, Alemania, Argentina, Australia, Chile, Italia, Sudáfrica, Portugal, Francia... Todo ello permite que su bodega sea reconocida a nivel mundial y recientemente haya sido calificada como una de las 5 mejores del mundo. ¿Y cuál es ese lugar mágico? Pues nada más y nada menos que se trata del restaurante Rekondo en el Monte Igueldo en Donostia. Ya la ubicación es todo un lujo para la vista.
Del restaurante en sí se puede destacar que bien podría ser un chalet o un caserío con solera, con una terraza ideal para el verano. En su interior, las mesas
están bien vestidas, con suficiente separación. A pesar de los años de la casa,
tiene un porte señorial y la decoración aun siendo clásica, cumple sobradamente su cometido. Además de un comedor principal, dispone de espacios para reuniones privadas, incluso en la propia bodega. De veras que hay donde elegir. Siempre lo ha llevado la familia. En el vestíbulo nos recibe Txomin, el director de la orquesta, con fotos relacionadas con la tauromaquia (como buen aficionado a los toros que es él), mientras que su hija Lourdes, que es todo amabilidad y cordialidad con los comensales,
le otorga al lugar un contrapunto moderno efectivo y necesario.
¡¡Sobre la comida hay tanto y bueno que decir!! Comida excelente, con una calidad que sorprende y con el método de siempre; es decir gastronomía vasca tradicional de calidad, sin pretensiones innovadoras. En realidad se puede comer cualquier cosa que el paladar más exigente jamás se verá decepcionado. Por tanto, lo que prima en Rekondo es la extraordinaria materia prima: kokotxas, merluza, lenguado, txangurro, chipirones, besugo, arroz con almejas, solomillo, ibéricos, croquetas,
revueltos, espárragos, etc... Y por si todo ello no fuera suficiente, los postres son espectaculares. "Faena gastronómica" de dos orejas y rabo como le gustaría a nuestro amigo Txomin...
Manjares gastronómicos más vino solo tienen un nombre, y ese es sin lugar a dudas, el restaurante Rekondo.
Igeldo Pasealekua, 57, 20008,
Donostia-San Sebastián, Guipúzcoa
943 21 29 07
Probablemente, el restaurante que mejor se ajusta a mis gustos y expectativas. Calidad sin inventos peculiares, pero nada de cocina básica. Alta cocina sin salirse de la tradición. Solía ir de pequeño con todos mis primos el día de navidad. Qué recuerdos!
ResponderEliminar¡¡Qué razón tienes, Epai!! Grandes recuerdos, desde luego...
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