Bueno, queridos lectores, ya estamos de vuelta en vuestro blog favorito, el cual evidentemente se ha visto afectado por las diferentes restricciones. Esperemos que vayamos tomando el ritmo normal de publicaciones. Desde luego, que será el mejor síntoma de normalidad. Hoy visitamos mi tierra querida, Asturias. Muy cerca de la maravillosa villa marinera de Llanes nos encontramos un pueblo, que rebosa paz, tranquilidad y armonía: La Pereda. Es increíble que a tan solo tres kilometros de aquella villa turística se acabe el bullicio y nos adentremos en plena naturaleza, para además, por supuesto, degustar un menú de altura en La Posada de Babel.
Verdaderamente el lugar merece una visita. El que va se enamora. En realidad, se trata de un hotel-apartamento de 3 estrellas con 10 habitaciones y 3 apartamentos, repartidos en cuatro construcciones: el edificio central, un granero restaurado, un pabellón de madera de teka en forma de cubo y la Casa de la Palmera con el Apartamento del Jardín. Una auténtica delicia para la vista y para el gusto, dado que los platos que se ofrecen son de una gran altura gastronómica ¡¡Por fin, el binomio hotel-restaurante funciona!!
Si esperan una degustación de los típicos platos asturianos, craso error. Ni los precios, ni la gastronomía son autóctonos, pero la experiencia lo vale. el inicio fue delicadísimo: corazones de alcachofa con láminas de jamón. Homenaje al paladar. Una alcachofa de calidad es la reina del mundo vegetal a la que se debe rendir pleitesía. En este caso ambos comensales así lo hicimos.
Última visita: 09/07/21
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